Cuando en la entrevista de trabajo te hablan del sueldo que percibirás, normalmente se refieren al sueldo bruto. Es importante que sepas diferenciar entre sueldo bruto y neto ya que las cifras varían mucho.
El salario bruto es aquel que recibe el trabajador antes de descontar las retenciones y cotizaciones que se aplican por ley. Cuando consultes tu nómina verás que tu salario bruto es aquel que aparece en `Devengos´ y puede estar desglosado en varios conceptos. Por otro lado, las retenciones y cotizaciones aparecen en la parte llamada `Deducciones´ y hacen referencia a:
Es un impuesto progresivo, es decir, cuanto
más ganas más pagas y suele oscilar entre un 2% y un 46% dependiendo de lo que
cobres.
El salario neto es,
por tanto, la cifra que queda después de restar las aportaciones a la Seguridad
Social y el IRPF y es lo que recibirás en tu cuenta corriente.